Kage no Jitsuryokusha ni Naritakute! - Volumen 4: 5. ¡Entre las sombras de mi nostálgico Japón!
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- Volumen 4: 5. ¡Entre las sombras de mi nostálgico Japón!
Akane y su grupo encontraron los cuerpos de los 3 caballeros y luego regresaron a la universidad Nishino.
Las entradas estaban bien selladas.
La seguridad por la noche también era estricta, después de todo, era por las noches que las bestias mágicas se movían con más frecuencia.
El área estaba iluminada por varias torres, y encima de esas torres había caballeros vigilando siempre. Como la entrada estaba resguardada por una muralla alta, las bestias mágicas no podían entrar, y si lograban cruzar por alguna razón, los caballeros harían sonar la alarma rápidamente.
Pero esa noche, los caballeros que estaban de turno encontraron a Akane y su pequeño grupo en vez de bestias mágicas.
“¿Eso es lo único que vas a informar?”
La persona que salió a ver a Akane fue su hermano mayor, Nishino Akira. Él llevaba una bata blanca y anteojos, y una mirada de pocos amigos con el ceño fruncido.
“Sí. La responsabilidad es completamente mía”.
Akane mandó a sus compañeros heridos con el equipo de médicos, y luego terminó de darle el informe a su hermano.
La responsabilidad de salir por la noche junto a otros caballeros era totalmente suya. Akane estaba en desacuerdo con su hermano con muchas cosas, pero no planeaba poner excusas.
“Tú no eres quien decides eso”.
“Ellos simplemente obedecieron mis órdenes”.
“¿Lo dices en serio?”
“Sí”.
Akane respondió y Akira deformó su expresión con una sonrisa.
“Le preguntaré a todos sobre eso más tarde. Me pregunto qué responderán. De verdad solo obedecieron órdenes, o actuaron por cuenta propia”.
“…”
Akane en realidad no había ordenado nada. Ella intentó ir sola, pero ellos la siguieron.
“Sabes que las mentiras siempre se descubren con testimonios, ¿no?”
Akane bajó la mirada.
“Pero por suerte, no soy un demonio ni nada parecido. Al parecer trajiste a dos refugiados, una incluso pasó por el despertar”.
“… Sí”.
“¿Dónde están? Llévame con ellos”.
“Ambos están desmayados. Deberíamos esperar a que recuperen la conciencia y se tranquilicen—”
“Llévame con ellos, ahora”.
“… Sí”.
***
Akane los llevó a una sala de cuidados ubicada en una zona residencial.
El área residencial estaba sobrepoblada. Incluso desde la habitación de Akane, se podían ver a las personas durmiendo en los pasillos.
“Es aquí”.
Akane entró a la habitación y rápidamente una voz alegre resonó por la sala.
“Akane-san, ¿eres tú? Llegas justo a tiempo, el chico ya—”
La persona que la recibió, era una mujer de bata blanca y expresión gentil. Ella vio a Akira detrás de Akane y dejó de hablar.
“Yuuka-sensei, no se preocupe, puede hablar”. Instó Akane, y la mujer de bata blanca llamada Yuuka comenzó a hablar lentamente.
“El chico acaba de despertar”.
En la habitación había dos camas, en una estaba el chico y en la otra la chica.
La chica todavía no había despertado, pero el chico ya se había levantado y estaba viéndolos con clara confusión.
“D-Disculpen, ¿dónde estoy…?” Preguntó el chico.
“Estás en la universidad Nishino. Los trajimos hasta aquí luego de encontrarlos desmayados en el hospital. ¿Puedes recordar lo que te pasó?” Dijo Yuuka cálidamente.
“¿En el hospital…? ¿Por qué estaba en el hospital…?”
“Parece que sus recuerdos aún están confusos”. Dijo Yuuka.
“¿Se pondrá bien?”
“Probablemente. Creo que es algo temporal debido al poder mágico”.
“Puede que él haya visto a uno de los Brutals”.
“¿La clase alta que mencionaste en el informe? En ese caso, haz que lo recuerde”. Yuuka asintió de mala gana y luego volvió a hablarle al chico.
“¿Puedes recordar algo? ¿Cuál es tu nombre?”
“¿Mi nombre…? M-Mi nombre es… Minoru”. Dijo el chico, llamándose a sí mismo Minoru. Akane al escuchar ese nombre, recordó la figura de cierto chico.
De hecho, la atmosfera de él y este chico eran parecidas, eso fue lo que ella sintió.
“¿Y tú apellido? ¿Puedes recordarlo?”
“Kage… l-lo siento, no lo recuerdo”.
“Ya veo. ¿Y qué me dices de la chica de allí?”
“¿Chica…? ¡Ah, ¿Natsume?! ¡¿Natsume está bien?!” El chico abrió sus ojos con sorpresa.
“¿Su nombre es Natsume? Ella se encuentra bien, no te preocupes”.
“Qué bueno… me alegra que mi hermana menor esté bien”. Dijo Minoru suspirando de alivio.
“¿Entonces es tu hermana? ¿Qué recuerdas de ella?”
“Mi hermana es… bueno… es…”
“Lo sé, ella ya pasó por el despertar, ¿no?”
“¿Ah? ¡Ahh, s-sí! E-Ella tiene las orejas un poco largas y su cabello es plateado, pero…”
“Sí, pero es una buena chica, ¿verdad?”
“¿Ah? ¡Ahh, s-sí, es una buena chica! Pero a decir verdad, ella no puede hablar…”
“¿No puede hablar…? Ya veo, debió ser duro para ambos”.
Si no puede hablar, eso significa que tras su despertar su cuerpo había sufrido un gran cambio.
Debió ser complicado para ambos comunicarse luego de eso.
“Mi nombre es Yuuka, la doctora de este lugar. No te preocupes, yo me haré cargo de ella y—”
“… No, yo me haré cargo de ella”. Interrumpió Akira, hablándole a Minoru.
“E-Ehmm… ¿quién eres tú?”
“Yo soy Nishino Akira, una de las personas a cargo de este lugar. Antes solía ser investigador, y ahora estoy a cargo de descubrir más sobre el despertar y los poderes mágicos. En otras palabras, mi trabajo es esforzarme para ayudar al mayor número de personas posible”.
“Y-Ya veo…”
“Debió ser difícil tratar con tu hermana menor en ese estado. Tranquilo, yo te entiendo. Después de todo, mi hermanita también pasó por lo mismo”.
“¿Tu hermana también…?”
“¿Puedes dejarme a cargo de Natsume-san? Te prometo que haré que vuelva a hablar”.
“¿Eh? Pero… tengo que preguntárselo a ella”.
“¿Hmm? ¿Cómo si no puede hablar?”
“Ah, bueno no puede hablar, pero nos podemos comunicar por gestos o señas…”
“Ya veo. Entonces todavía guarda voluntad propia…” Dijo Akira con una expresión complicada.
“Onii-sama, ella todavía no ha despertado, y él parece estar confundido. ¿Qué tal si hablamos de esto otro día?”
“… Sí, puede que me haya apresurado un poco. No te preocupes por nada, descansa tranquilo. Desde hoy, tú también eres uno de nuestros compañeros aquí en Mesías”.
“M-Muchas gracias…”
Akira le habló al chico con una voz amable y luego, junto a Akane, dejaron la habitación. Luego, sonrió con un rostro inexpresivo.
“Niño ingenuo”.
“¿Qué piensas hacer con ellos?”
Su única respuesta fue una risa seca mientras regresaba al edificio de la escuela.
***
“No hay moros en la costa”.
La voz de Cid resonó por la habitación médica débilmente iluminada.
Luego de un rato de charla con la doctora, ella también se había ido y ahora solo estaban Cid y Beta solos.
“Shadow-sama…”
Cuando Beta abrió los ojos, lo vio sentado en la parte baja de la ventana, de cara hacia la luna. Esa figura se veía divina, como si aquellos ojos negros estuvieran viendo un futuro lejano desde el presente.
“Parece que ya puede hablar a la perfección el idioma de este mundo”.
Eso fue lo que más le sorprendió a Beta de la interacción que había estado observando. Beta se sorprendió del hecho de que él pudiera aprender las palabras en tan pocas horas, pero le sorprendió aún más verlo hablando el idioma recreando un acento completamente igual a la de las personas de este mundo.
“Eso es porque estuve escuchando sus conversaciones mientras fingía estar desmayado. Escuché el fino sonido de sus palabras, y los movimientos de sus bocas, y así conecté los significados. Fue una tarea sencilla…”
Beta miró con gran respeto a Cid que decía lo que había logrado como si no hubiera sido la gran cosa.
Aun si había escuchado la conversación de las otras personas, solo tuvo un poco tiempo para hacerlo, y aun recreando las expresiones y movimientos bucales de las personas de este mundo, su acento era demasiado fluido.
Lo que él había hecho era algo más allá de lo divino, una técnica para comprender la teoría de un idioma en el menor tiempo posible.
“Mi nombre aquí es Minoru, y tu nombre es Natsume. Por el momento seremos hermanos”.
“¿Hermanos?”
“Sí, esa forma es más conveniente. Por cierto, Natsume es muda”.
“Bueno, eso es conveniente, de cualquier forma, no puedo hablar el idioma de este lugar. Pero me esforzaré para poder hacerlo”.
“No, será mejor que no hables mientras estemos aquí… no sé por qué, pero creo que esa es la mejor idea”.
“Ya entiendo… en ese caso no hablaré”.
De seguro era un plan para conseguir información mientras las otras personas bajaban la guardia hacia Beta quien supuestamente no podía hablar. Era una buena idea aprovecharse de eso.
Pero por eso mismo, ella sentía que era sumamente indispensable aprender el idioma de este país lo más pronto posible.
“Ahora hablemos de lo que haremos a partir de ahora. Será mejor quedarnos un tiempo por aquí para recopilar información”.
“Información…”
Él dijo que había venido a este mundo en busca de poder. Pero ¿qué poder era ese?
De seguro se refería al conocimiento y tecnología de este mundo.
El avance tecnológico en este mundo era sumamente superior en comparación al del que venían.
Si podían llevar algo de esas dos cosas de regreso, el jardín de las sombras daría un gran paso hacia adelante. Eso era prueba de que ese poder al que se refería, era de suma importancia para ellas, y por eso él vino hasta aquí a buscarlo.
“Por eso, propongo que hagamos tareas por separado”.
“¿Tareas por separado?”
“Ellos al ver tu cabello y tus orejas largas pensaron que tienes una enfermedad”.
“Ya veo”.
De seguro él les hizo pensar eso para poder ver las cosas desde un punto de vista diferente. La forma más rápida de conseguir información, siempre era perteneciendo a un grupo.
Y ahora él había logrado infiltrarse con facilidad a un grupo ya existente, mediante una reacción flexible y una comunicación perfecta.
Lo único que tenían que hacer ahora, era obtener el mayor número de conocimientos de esta pequeña comunidad y llevársela de regreso.
Para regresar, solo tenían que seguir el flujo de poder mágico de Mordred. Como él se había fusionado con Ragnarok, su cuerpo todavía debía estar conectado con el otro mundo.
Por eso, Beta estaba confiada de que, si lo encontraban, podrían recrear la Rosa Negra.
“Y parece que una de las personas a cargo de este lugar quiere estudiar esa enfermedad”.
“Ya entiendo, conque de eso se trata…”
El trabajo de Beta era infiltrarse exitosamente en el centro de esta comunidad y recopilar información.
“Así es. Trata de actuar enferma en la medida de lo posible, y cuidado con hacer movimientos que puedan llamar la atención”.
“Entendido, haré todo lo posible para que no me descubran”.
Él estaba diciendo que en la superficie actuara como una persona enferma para despistar a las personas de aquí, y luego aprovechar esa posición para recopilar información.
“Bien, desde mañana tienes que encargarte de Nishino Akira”.
“Sí. ¿Cómo desea que le dé los informes?”
“Yo iré a preguntarte directamente”.
En otras palabras, no había una fecha específica, todo quedaba de acuerdo a la discreción de Beta.
“… Como usted desee”.
“Bien”.
Él, tranquilo como siempre, puso algo de agua en un vaso.
A pesar de estar en un lugar desconocido, él no tenía ni un solo rastro de tensión o nerviosismo, era como si estuviera en su segundo hogar, pero era esa confianza absoluta lo que le permitía actuar de forma tan natural.
La confianza de sobrepasar cualquier situación, en cualquier lugar y en todo momento. Beta rápidamente sacó desde su cama un manuscrito de las ‘Crónicas de Shadow-sama’ para nunca olvidar este momento.
La recopilación de información comenzaría mañana. Aunque él ya había dominado el idioma, conseguido información general y levantado un gran plan en tan solo unas cuantas horas. Además de eso, logró infiltrar con éxito a Beta en el centro de esta comunidad.
Probablemente, ellos iban a descubrir todo acerca de esta comunidad en unos pocos días. Beta estaba segura de ello.
***
¡Una nueva mañana está aquí, una mañana llena de esperanzas!
Luego de dejar a Beta con Nishino Akira, respiré profundo, el aire fresco a mi alrededor.
Con esto, Beta no podrá moverse con libertad.
Su aprendizaje del japonés debería demorarse un poco, así que no debería ser capaz de descubrir mis mentiras todavía. Mientras tanto, buscaré una forma de cómo regresar.
“Fufufu… mi plan es perfecto”.
Bien, ahora el problema es que no sabía cuánto tiempo le tomaría a Beta aprender japonés… ella es inteligente después de todo.
¿Medio año… tal vez?
Pero puede que sean solo tres meses.
Pero en tres meses, debería encontrar una pista definitiva de cómo regresar a nuestro mundo. Si llegamos a este mediante el otro, entonces en este debe haber alguna ruta que conecte con el otro, lógica simple.
Por el momento, buscaré información sobre un agujero negro, y un enorme poder mágico… mientras disfruto de este Japón, por supuesto.
No había duda de que este era el Japón en el que vivía antes.
Mi casa todavía está aquí, aunque destruida, y sorpresa, sorpresa, incluso me encontré con Nishino Akane, una antigua compañera de clases. Por lo que pude ver ella, ya tiene unos 20 años.
En otras palabras, han pasado ya unos cuantos años desde mi muerte, y en esos años, ocurrió algo con el poder mágico en este mundo.
Estoy seguro de que hay algo escondido en este lugar, un evento definitivamente divertido. Así, una eminencia en las sombras desciende desde otro mundo en un Japón apocalíptico. Mientras pensaba en eso con una sonrisa, alguien tocó a la puerta.
“Minoru-kun, buenos días”.
“E-Eres la chica de ayer…”
“Es cierto, todavía no me he presentado. Mi nombre es Nishino Akane, una caballero de esta base”.
Al abrir la puerta, allí apareció Nishino Akane vistiendo un uniforme bastante nostálgico para mí.
Ella tenía cabello negro y ojos rojos. Antes eran de color negro, pero al parecer cambiaron de color por algo referente al poder mágico o algo así.
Luego una blusa blanca y una falda a cuadros, seguido por unas medias largas de color negro. Ella estaba llevando el uniforme de la preparatoria Sakurazaka, qué nostálgico.
“Ese uniforme…”
“¿Éste? Es el uniforme de la preparatoria Sakurazaka. Aunque aquí en Mesías, es el uniforme de los caballeros. La policía usa su propio uniforme, ¿no? Para nosotros, este uniforme es algo parecido”. Dijo ella, dando una pequeña vuelta para mostrar su uniforme.
“Ya veo. Mis recuerdos todavía están algo confusos…”
“Eso pensé. No te preocupes, ve recordando poco a poco. Yo te responderé cualquier pregunta que tengas”.
“Muchas gracias. En ese caso, ¿puedo hacer una?”
“Por supuesto. Ah, pero antes…”
Con una cálida sonrisa… “¿Vienes a desayunar?” Dijo ella.
***
En el pilotis de la universidad había mucha gente reunida, formando una fila frente a la comida.
Nosotros también nos alineamos al final de esa fila.
“Sorprendido, ¿verdad?”
“¿Eh? Ah, sí…”
No sé con qué debía sorprenderme.
“Mesías puede producir alimentos suficientes para todas estas personas. Como hay generadores de energía, utilizamos esas instalaciones para producir alimentos”. Dijo ella un tanto orgullosa.
“Como la seguridad también es estable, esta es la base más poblada de la zona”.
“Increíble”.
“Pero por eso mismo, hay problemas”.
“¿Umm?”
“Nos hacen falta más caballeros. Un caballero tiene que proteger la vida de más de 100 personas, por eso, la carga que soportan es demasiado grande y últimamente hay muchas bajas… por eso… ella también…”
“¿Ella…?”
“No es nada. Por cierto, vi a Natsume-san en el laboratorio”.
“Sí, pensé que sería mejor dejarla en manos de Akira-sensei”.
“Ya veo… lo siento”.
“¿Por qué te disculpas?”
Ella no dijo nada, solo sacudió su cabeza.
“No es nada. Puedes dejarla en mis manos, yo también haré todo lo posible para ayudarla”.
“Gracias”.
Vigílenla de cerca para que no se escape, por favor.
“Mi hermano… a decir verdad, es un gran científico. No solo hizo funcionar el generador, sino que también la planta. Pero por eso mismo, es buscado junto con todo ese equipo por las personas de otras bases”.
“Ya veo”.
“Por eso él está apurado por conseguir más apoyo”. Dijo ella en voz baja para que no la escuchara.
Luego de recibir la comida, nos trasladamos hasta una pequeña plaza llena de césped.
“¿Puedo hacer una pregunta?” Dije mientras comíamos.
“Por supuesto, adelante”.
El menú era gachas de avenas, arroz integral y verduras, mientras que el condimento, creo que es miso. Es algo sencillo pero saludable.
Aunque, aun así, ella estaba orgullosa de esto. Parece que en el mundo actual esta era la mejor comida que podían tener.
“Mis recuerdos todavía están confusos, y hay muchas cosas que no entiendo. Quisiera saber cómo sucedieron las cosas desde el principio…”
“¿Desde el principio…?”
“Me refiero al día en que Japón se convirtió en esto”.
“Ya veo, entonces te refieres al incidente de hace 3 años”. Ya veo, con que fue hace 3 años.
“Sí, un resumen está bien”.
“Está bien… hace 3 años, las bestias mágicas aparecieron de la nada en Japón y el mundo cambió por completo. Las armas que tenemos no funcionan contra ellos y solo en un año, la población disminuyó drásticamente. Algunos dicen que solo queda un décimo o un céntimo de lo que era antes, pero la verdad es que, en la actualidad, ya nadie sabe los dígitos exactos. Y aun así, nosotros fuimos aprendiendo poco a poco”.
Luego de terminar de comer, ella ordenó los trastos y siguió. Por cierto, yo también seguía comiendo.
“Aprendimos que las bestias mágicas son activas durante la noche y durante el día permanecen en sus nidos. Por eso, las personas comenzamos a movernos más durante el día y a ser precavidos de noche, ya que no teníamos que preocuparnos por sus ataques durante las horas del día. Y así, poco a poco fuimos ganando fuerza y conocimientos”.
Supongo que, con bestias mágicas, se refieren a esos monstruos debiluchos.
Es verdad que muchos eran nocturnos, pero no todos lo eran, así que deberían tenerlo presente.
“Al parecer, fue un científico en el extranjero el primero en darse cuenta del poder mágico. Todavía no sabemos si es real o cierto porque para ese entonces, los medios de comunicación estaban casi totalmente cortados, pero escuchamos de personas llamadas Caballeros capaces de enfrentarse a las bestias mágicas. Con ese rumor como base, Japón también comenzó a investigar sobre el poder mágico”.
Parece que este mundo se puso interesante luego de que me fui.
De seguro, las dos luces mágicas que vi antes de morir fueron por donde llegaron las bestias mágicas, sí, no tengo dudas de eso.
“Luego, en Japón también apareció un caballero. Fue justamente hace un año, una chica con un brillante cabello dorado que no parecía japonesa, a la que llamaron “La Primera Caballero” y fue tomada como símbolo de esperanza. Pero contrario a las expectativas de las personas, ella pasó por el Despertar, y el poder mágico que obtuvo fue tan grande que su personalidad se corrompió, mató a todas las personas de Arcadia y desapareció”. Dijo ella con su voz temblorosa por alguna razón.
Me tragué lo último de avena que me quedaba y terminé de comer.
“Arcadia era la base a la que las personas se referían como la última utopía de Japón. Había muchos investigadores, nacieron muchos caballeros y por eso, todas las personas buscaban pertenecer a Arcadia, después de todo, con la ayuda de la Primera Caballero, Arcadia se convirtió en la base que más bestias mágicas derrotó. Pero por eso mismo, cuando ella exterminó a las personas de Arcadia, el último paraíso de japón también colapso…” Dijo ella, sosteniendo con fuerza sus propios hombros como si estuviera tratando de evitar que su cuerpo temblara.
“¿Estás bien?”
“E-Estoy bien”. Bien.
No tengo ni idea de qué era eso del despertar, pero supongo que es igual a la posesión.
“Luego de que las personas perdieran sus últimas esperanzas, todos comenzaron a pelear por sí mismos. Peleas entre bases por caballeros, por alimentos, y así, poco a poco Japón se fue encaminando hacia su verdadero colapso…”
Bueno, supongo que en otros países deberían estar pasándola igual.
“Al parecer, mi hermano es un superviviente de Arcadia”.
“… ¿Al parecer?”
“Yo tampoco recuerdo muy bien lo que pasó en esos momentos. Mis recuerdos están confusos, tal vez por el poder mágico…” Dijo ella cabizbaja.
“Nosotros desde un principio estábamos en la base de la universidad Nishino, pero mi hermano fue a Arcadia para investigar, por eso, él es quien más sabe sobre los caballeros, el despertar y quien está haciendo todo lo posible para salvar a las personas… o al menos eso quiero creer. Nadie comprende las investigaciones de mi hermano, solo él las entiende…”
“Ya veo…”
Creo que aquí es donde tengo que hacer una expresión de confusión.
“Lo siento, sé que esto no tiene nada que ver contigo, Minoru-kun”.
“No te preocupes”.
“A veces siento que no es la primera vez que hablo así contigo. Siento algo de nostalgia, un sentimiento de paz, como si recordara un lejano pasado… es extraño”.
Ella sonrió con una expresión solitaria.
“Cambiando de tema, ¿ya pudiste recordar algo?”
“¿Eh? Ah, sí, parece como si estoy a punto de recordar algo…”
“Ve poco a poco. ¿Puedes recordar lo que sucedió en la base que estabas? ¿Fueron atacados por bestias mágicas, o por personas…?”
“Uhhh… ¡mi cabeza…!”
“¡N-No te sobre esfuerces!”
Como había dicho que mis recuerdos eran confusos, podía fingir este tipo de reacciones en momentos de desventaja.
“Tranquilo, puedes ir haciéndolo poco a poco”.
Ella frotó levemente mi espalda mientras yo estaba en una posición de pensador. Bien, aceptaré un poco de esa gentileza.
Luego de eso, hablamos por un rato más y ella se dirigió a sus trabajos como caballero y yo regresé al consultorio.
“¡¿En dónde estabas?!”
Al regresar a la sala médico, Yuuka-sensei me estaba esperando con un gran puchero en sus mejillas. Luego de explicarle lo que pasó, me disculpé.
“Dios, ¿por qué Akane-san no me lo dijo? Estaba preocupada, ¿sabes? Ya casi comienza al estampida así que es peligroso estar afuera”. Dijo Yuuka-sensei mientras medía mi presión arterial.
“Disculpe, ¿qué es la estampida?”
“Veo que también olvidaste eso… tu cuerpo ya se encuentra bien, así que el efecto del poder mágico debería desaparecer en cualquier momento y tus recuerdos regresarán a ti. Para resumir, la estampida es cuando las bestias mágicas comienzan a descontrolarse”.
“¿Descontrolarse…?”
“Así es. Ya sabes que las bestias mágicas construyen sus nidos en grupo, ¿no? Ellos se reproducen en ese lugar, pero cuando su cantidad rebaza un límite, se vuelven más salvajes de lo normal. Es más fácil si imaginas que comienzan a pelear para deshacerse de la sobrepoblación de sus nidos”.
“¿Y qué sucede cuando eso pasa?”
“Comienzan a buscar alimentos para llevar a su nuevo nido. Por supuesto, el alimento para ellos, somos nosotros. En medio de la estampida, las bestias mágicas son más salvajes y no se rinden mientras sigan con vida, por eso son peligrosas”.
“… ¿Entonces muy pronto ocurrirá una estampida cerca de aquí?”
“Sí, exacto”.
Asintió Yuuka-sensei, sacando un mapa. En el mapa había varios puntos señalados con palabras e indicaciones.
“Este es el hospital en el que los encontraron. Era el más reciente de por aquí, pero me alegra que los caballeros lo hayan dominado antes de que comenzaran a poblarlo”. Dijo ella, haciendo un círculo alrededor del punto del hospital y agregando unas notas y la fecha de ayer.
“Parece que todavía hay muchos nidos”.
“Así es. Hay unos 29 nidos alrededor de la universidad Nishino, pero solo hemos podido conquistar 14 de ellos”.
“Eso nos deja con 15 todavía…”
“Sí, aunque como ves, muchos han sido conquistados. Es más fácil someterlos cuando todavía no hay un número tan grande de bestias mágicas”.
“¿Y qué sucede si un nido crece demasiado?” Yuuka-sensei negó con la cabeza.
“Mesías no podría contra un nido grande. Podría funcionar si colaboramos con otras bases, pero eso también es complicado. Los nidos más grandes están lejos de las bases, y mandar un equipo de subyugación significa dejar la base desprotegida. Si eso pasa y las bestias mágicas nos atacan, no tendríamos oportunidad alguna…”
“Ya entiendo. Pero de la misma forma no tiene sentido mandar un número pequeño a un lugar tan grande y lejano”.
Ella asintió.
“Últimamente, el número de nidos grandes ha aumentado a una distancia más lejana a la de las bases. Mira esto, en lo que va del año han aparecido al menos 7 nidos grandes”.
“Será peligroso si siguen expandiéndose”.
“Los caballeros tratan de patrullar las áreas y eliminarlos cuando todavía son nidos pequeños, pero actualmente, el número de caballeros y guardias es muy reducido…” Dijo ella seguido de un largo suspiro.
“Pero el problema en sí, no es la distancia que tienen con la base. Después de todo, incluso en una estampida, no es seguro que lleguen hasta Mesías”.
“Pero significa que podrían llegar a otras bases más lejanas”.
“Así es. Por eso, este es el punto que nos está dando problemas”. Dijo Yuuka-sensei, señalando a otro punto en el mapa. Era un lugar bastante familiar para mí.
“La preparatoria Sakurazaka…”
“Queda a un kilómetro de esta universidad, pero es aquí donde está el nido más grande de esta área. Aquí se produce una estampida cada 3 meses, y ellos sí llegan hasta Mesías”.
“El ambiente en Mesías es bueno, pero el ambiente alrededor de él no lo es, ya entiendo”.
“Ese es el problema que tenemos en Mesías. Tratamos de contactar a otras bases para poder eliminar el nido, pero ha sido en vano”.
“Porque saben que cuando ocurre la estampida, el ataque de las bestias mágicas se concentra en esta universidad, entiendo el por qué no quieren ayudar”.
“Intentamos negociar de varias formas, pero nada ha funcionado. Por eso es que necesitamos toda la ayuda posible. En una estampida, es casi seguro que muchos caballeros morirán. Normalmente decenas de ellos… pero esta vez hay bestias mágicas de clase superior”.
“… ¿Clase superior?”
“Una especie mucho más poderosa que las bestias mágicas comunes. Últimamente hay avistamientos de clases superiores rondando por esta zona. Probablemente es el mismo que Akane-san nombró como Brutal”.
“¿Brutal…?”
¿Será que esa bestia mágica es más fuerte que las que encontramos?
“Si Brutal está en medio de esa estampida, es seguro que muchos caballeros morirán. Si eso pasa, nos vemos con el temor de que Mesías colapse por falta de caballeros. Por eso, cada vez que se acerca una estampida—”
En ese instante, se escucharon gritos y voces violentas desde afuera. No era una o dos personas, eran docenas.
“De seguro es otra pelea. Casi siempre alguien muere, así que no debes salir hasta que lleguen los caballeros. Mesías estaría completa si no fuera por las estampidas, podríamos llegar a ser incluso una segunda Arcadia… Por eso, quiero decir que, por lo general, este lugar es seguro, aunque hay peleas a veces… siempre se detienen”.
Eso dice ella, pero el ruido afuera comenzó a hacerse más y más grande.
¡Es más, ¿soy yo, o escucho como a 100 personas peleando?! Pensé, y en ese momento escuché la voz de Akane-chan.
“Parece que Akane-san ya llegó, no hay de qué preocuparse”. Dijo ella con un suspiro de alivio.
“Bien, hora de trabajar. Iré a atender a los heridos”.
“Buena suerte”.
Ella se dio la vuelta y salió de la sala médica.
Mientras tanto yo, también me di la vuelta y volví a abrir el mapa.
“Me pregunto cuál punto debería visitar primero… Pito pito gorgorito…”
***
El color rojo en el cielo iba expandiéndose y desapareciendo a medida que el sol se ponía.
Akane suspiró mientras veía ese paisaje. Finalmente había terminado todos sus quehaceres por hoy.
Hoy a ella le había tocado de día. Los trabajos de los caballeros se dividen en 2 partes. Recorrer las instalaciones de día y resguardar las instalaciones desde afuera en las noches.
El trabajo de los caballeros que tienen que salir de la base, era más que nada encontrar nidos pequeños para destruirlos, aunque hoy al parecer, habían ido a investigar rastros del clase superior por órdenes de Akira. Akane no participó en ese grupo, así que no sabía los detalles.
El trabajo de hoy de Akane, era vigilar los alrededores de la base desde el interior, o en otras palabras, actuar como la policía para las personas que vivían aquí. Por lo general era un trabajo fácil.
Sin embargo, como solía pasar antes de una estampida, algunas personas organizaban motines por alguna razón, y causaban grandes problemas o peleas.
Sin mencionar que, desde mañana en la noche, las cosas se pondrán más peligrosas.
“Estoy cansada…” Dijo Akane mientras se estiraba.
“Bienvenida de regreso”. Dijo alguien desde atrás de ella.
Akane giró y se encontró con una hermosa chica en bata blanca.
“Yuuka-sensei…”
“Hoy sí que la tuviste difícil”.
“No tanto como usted. Tuvo que tratar a varios heridos, ¿verdad?”
“Sí, pero al menos no hubo ningún muerto gracias a que llegaste rápido”. Asintieron ambas con una sonrisa débil por el agotamiento.
“Quería hablarte sobre el chico…”
“¿El chico?”
“Sobre Minoru-kun. Él ya se recuperó, así que solo queda esperar a que sus recuerdos regresen poco a poco”.
“Me alegro”.
“Hoy dormirá en la sala médica como siempre, pero a partir de mañana será algo complicado dejarlo estar ahí. Ya de por sí, la sala está llena por los heridos de hoy, así que no creo que tenga un lugar para dejarlo dormir…”
“Aah, ya veo. En ese caso le preguntaré al departamento de recursos si tiene una habitación disponible”.
“Sobre eso…” Dijo Yuuka con una mirada complicada.
“¿Ocurre algo?”
“Minoru-kun todavía está confundido por la pérdida de memoria y no recuerda muchas cosas. Tenemos que enseñarle las reglas de Mesías y una vez se acostumbre, también debemos darle un trabajo. Pero eso será complicado sin una persona adecuada para hacerse cargo de él. Normalmente ese sería mi trabajo, pero por lo de hoy, no me doy abasto…”
“Ya veo, entiendo…”
Ahora que pensaba en ello, era obvio. Aunque Mesías fuera un lugar seguro, para un chico sin recuerdos sería complicado vivir aquí y más justo antes de una estampida.
Al recordar su rostro en su mente, Akane llegó a una extraña idea.
“En ese caso, yo me ocuparé de Minoru-kun”.
“¿Eh? ¿Tú?”
“Sí, en mi habitación todavía queda espacio—”
“¿Acaso estás pensando en vivir con él? Él es un chico, te lo recuerdo”.
“Todavía tiene unos 15 años. Es un niño”.
“Pero si tú recién tienes 20”.
“Y eso me hace una adulta. Además, soy un caballero, estaré bien”.
“Supongo que lo dices en serio… bueno, si eres tú, no creo que haya problema”. Dijo Yuuka dándose por vencida.
Ni siquiera Akane sabía por qué se le ocurrió esta idea. En otros casos, ella haría lo que era común y correcto, dejarlo con algún otro hombre.
Pero por alguna razón, ella lo quería a su lado.
“En ese caso, dejo a Minoru-kun a tu cargo. Ven a verlo mañana por la mañana”.
“Eso me da tiempo para limpiar un poco la habitación”.
Ambas rieron y luego se despidieron.
El área afuera ya estaba totalmente a oscuras. Akane aceleró un poco el paso, y… “Hey, al parecer hablaron de algo bastante interesante allí adentro”.
De repente, un hombre grandulón apareció desde la sombra de un pilar.
“Vice capitán Saejima… buenas noches”. Dijo Akane frunciendo el ceño.
“Oye, oye, ¿por qué tan fría conmigo? ¿No recuerdas que venimos de la misma preparatoria, e incluso de la misma clase? Akane-chan”. Dijo Saejima Juudai con una sonrisa.
Era un hombre musculoso con un rostro de gorila, pero al parecer, no tan feo. Era popular por ser un chico atractivo a pesar de su rostro de gorila, aunque Akane no lo consideraba ni un poco atractivo.
En la preparatoria era un hombre rudo, que participaba en las competencias nacionales del club de Judo. Aunque ella lo conocía desde preparatoria por ser compañeros de clase, a Akane nunca le agradó demasiado.
No, de hecho, ella lo odiaba y lo seguía odiando.
Esa mirada que observa cada parte del cuerpo de Akane, era lo que ella más odiaba.
“Solo sigo el papel de superior y subordinada”.
“Oh vamos, no digas eso”. Dijo él, acercándose y poniendo su mano sobre el hombro de Akane.
De repente, fue como si una corriente eléctrica viajara por todo el cuerpo de Akane.
A pesar de su personalidad, él era el vice capitán de los caballeros de Mesías, por lo que, a su vez, era el superior de Akane. Sus habilidades como caballero eran extremadamente altas, y a excepción de Akane, él era la persona más fuerte en Mesías.
“¿Es cierto que recogiste a un hombre anoche? Los caballeros están que rumorean sobre eso”.
“Estoy cansada por mi trabajo de hoy, si me disculpa regresaré a mi habitación”.
“Espera, te estoy hablando de trabajo. Escuché que también recogiste a una mujer de cabello plateado, eso sí fue un gran trabajo. Si es verdad eso de que pasó por el despertar, entonces vendría bien como refuerzo. Aunque al chico no lo necesitamos, sabes bien que ahora mismo no tenemos tiempo ni recursos para más personas, así que deja de aumentar la carga”.
“… Es verdad que ahora mismo en la base no hay suficientes caballeros, pero no pasará nada con agregar a una sola persona más…”
“¿Qué pasó con eso de actuar como subordinada? ¿Acaso una subordinada le tiene que responder a su superior así?”
Saejima apretó con fuerza el hombro de Akane.
“… Entendido”.
“El problema aquí es tu personalidad, Akane-chan. Es cierto que, a estas alturas, no pasará nada con agregar una o dos personas más. Pero ¿qué pasaría si otras personas te imitaran y recogieran a todos los que ven por allí afuera tirados? Deberías tener un poco más responsabilidad a la hora de tomar acciones, señorita Salvadora”. Dijo Saejima mirando fijamente al rostro de Akane con una expresión realmente irritante.
“Ayer también ignoraste las órdenes y por eso hiciste que varios caballeros salieran heridos. Si sigues comportándote así, jamás llegarás a ser una líder para los caballeros”.
“No tengo intenciones de serlo”.
“Te dije que no me respondieras”. Dijo Saejima, tomando a Akane del hombro como si la estuviera abrazando.
“Deténgase, por favor…”
“No me malinterpretes, Akane-chan. Esto solo es una lección de un superior hacia su subordinada. Después de todo, no solo causaste problemas, sino que recogiste a un chico con el que además vas a compartir habitación desde mañana. ¿No crees que eso es algo inmoral? Ya quiero conocer a ese afortunado”.
“Deténgase, por favor…”
“Ya veo, ¿no quieres presentármelo…? En ese caso tendré que arrojarlo a un nido de bestias mágicas. Ya sabes, como uno de los lideres de los caballeros es mi deber deshacerme de personas potencialmente peligrosas. Pero dependiendo de tus acciones, puede que cambie de parecer, ¿entiendes lo que digo?” Dijo Saejima, acercándose al rostro de Akane.
“… Ya para”.
Luego, el cuerpo de Saejima retrocedió, como si hubiera sido empujado.
El cuerpo de Akane estaba siendo rodeado por un denso poder mágico. Aunque era ligeramente superior al de Saejima, ni siquiera era todo su poder.
Un sudor frío recorrió la mejilla de Saejima.
“¡Maldita… ¿a-acaso sabes en qué posición te encuentras?!” Dijo él con su cara roja de enojo y vergüenza por retroceder con miedo.
“Lo entiendo perfectamente”.
“¡No, no entiendes nada, no entiendes absolutamente nada! ¡Pero que sepas que yo también sé algo, es más lo sé todo!”
“¿Saber? Exactamente qué es lo que sabes—”
“… Asesina”.
La expresión de Akane se congeló.
“¿Lo ves? Yo lo sé todo, Akane-chan la asesina”.
El rostro de Akane se puso pálido, como si estuviera presenciando algo increíble.
“Ya hice lo que tenía que hacer. Nos vemos, y espero que la próxima entiendas la posición en la que estás”.
“N-No es verdad… yo no…”
“Todo es verdad… asesina”.
Saejima se dio la vuelta y se marchó, dejando atrás a la chica que se quedó parada, consternada en el mismo lugar.
***
Era un pasillo blanco.
Las paredes, el piso y el techo estaban pintados de un color blanco puro. Por ese pasillo, Akane, una chica de cabello negro y ojos rojos, estaba caminando.
Ella caminó con un ritmo directo y constante, como si hubiera dejado todo sentimiento o emociones atrás.
Luego, ella se detuvo frente a una puerta.
Era una puerta blanca. Ella puso una contraseña y luego de que el seguro se desbloquease, ella entró.
“Veo que ya despertaste”. Dijo Akane con una sonrisa. Aquella cara inexpresiva de hace un rato ya no estaba por ningún sitio de su rostro.
“Akane-san, bienvenida. Sí, ella despertó por la tarde”. Dijo una chica en bata blanca, una de las subordinadas de Akira.
En la habitación, había una cama blanca, y encima de esa cama estaba sentada una chica hermosa de cabello plateado y unos ojos azules como de gato. Era Natsume.
“Encantada de conocerte, mi nombre es Nishino Akane”. Akane se presentó, pero Natsume solo la miró con duda.
“Parece que de verdad no entiende nada”. Dijo la chica de bata blanca.
“¿Tampoco entiende letras?”
“Sí, así parece… estaba enseñándole un libro ilustrado. Al parecer tiene bastante interés en eso, así que a este paso podría hablar en cualquier momento”. Dijo ella, con un libro ilustrado en sus manos.
Era un libro delgado.
En la biblioteca de la universidad, había muchos otros libros de escritores famosos, pero de seguro estaban alquilados. En esta base, incluso nacían niños cada año.
El problema de la escasez de alimentos era grave, pero tampoco podían prohibir que la gente tuviera hijos. Después de todo, si no los tuvieran, la humanidad se extinguiría tarde o temprano.
“Es una chica bastante linda…”
“Es verdad”.
Natsume, la vieran por donde la vieran era una chica que había pasado por el despertar, y también debe pasarla mal por no poder hablar ni entender lo que la gente habla.
Aun así, la mirada de Natsume hacia a Akane había sido pura, sin ni un solo rastro de precaución o desconfianza. De seguro, era una chica bastante gentil.
“Me pregunto que estará viendo”.
Los ojos de Natsume estaban viendo fijamente hacia el escritorio en un rincón de la habitación, más específicamente hacia un reloj electrónico.
“¿Quieres ver este reloj?”
Akane tomó el reloj y se lo dio, Natsume abrió sus ojos con admiración y alegría. Su reacción era natural, una completa curiosidad por el reloj que tenía en sus manos.
Su personalidad todavía era la de una menor, o incluso tal vez la de una niña pequeña.
“Fufufu, parece que lo disfruta”.
Natsume se veía realmente feliz tocando el reloj, dándole la vuelta, observándolo desde varios ángulos. Era como una pequeña niña inocente a la que le acababan de dar un juguete nuevo.
“A ella le da curiosidad todo lo que tiene alrededor. Antes de que llegaras, estaba tocando el marco de la cama o también mirando los tornillos”.
“Parece que es bastante curiosa”.
“Así es. Le presté mi bolígrafo y no lo soltó por media hora”.
“Qué linda~”
“Sí, es muy tierna”.
En ese momento, se escuchó un sonido consecutivo.
“¡Ah!”
Natsume se sorprendió por el sonido y tiró el reloj.
“Es solo la alarma. ¿Te asustaste? No te preocupes, no pasa nada”.
La mujer de bata recogió el reloj y lo volvió a poner en el escritorio, pero Natsume miraba eso con decepción.
“Ah, la hora se movió”. Señaló Akane.
“Supongo que movió la hora mientras lo tocaba”. Dijo la chica con bata blanca, arreglando la hora.
Pero luego ella se metió la mano en el bolsillo y se preguntó…
“¿Oh? ¿Dónde lo deje…?”
“¿Sucede algo?”
“Siempre cargo un reloj digital en el bolsillo. Pensé en utilizarlo para arreglar la hora de este, pero no lo encuentro…”
“¿Se te olvidó traerlo?”
“Siempre lo llevo conmigo, así que no creo. Qué raro…”
“Entonces puede que se te haya caído”.
“Tal vez. Las ligas ya estaban algo desgastadas, así que se pudo caer en algún lado”. La mujer suspiró dándose por vencida y luego vio a Natsume.
Ella estaba viendo a ambas fijamente con sus ojos azules, como si las estuviera escaneando. Aunque tal vez, solo lo estaban pensando demasiado.
Enseguida Natsume puso una inocente sonrisa y la miró con curiosidad, como si estuviera diciendo, “¿sucede algo?”
“Qué linda~”
“Es como una princesita”.
Ambas se olvidaron del reloj y acariciaron la cabeza de Natsume. Natsume simplemente las miró con una sonrisa.
Pero aquella mirada estaba observando detenidamente todos los movimientos de ellas dos.
Luego comenzó a mover los labios, pero sin sacar la voz, como si estuviera imitando las palabras de las dos chicas. Ella siguió repitiendo esos movimientos de labios una y otra vez sin que ambas se dieran cuenta.
En ese momento, la puerta de la habitación volvió a abrirse.
“¿Alguien ha visto mi cámara?”
Fue Akira el que entró.
“¿Cámara? ¿La que siempre usa para grabar?”
“Sí, la de siempre. La tenía hasta esta mañana…”
Él siempre cargaba una pequeña cámara digital para grabar sus investigaciones.
“No he visto ninguna en esta habitación. ¿No se le habrá caído por algún sitio?”
“Tch, en dónde está…”
Él miró por todos lados de la habitación con enojo, hasta que se centró en unos ojos azules que lo miraban.
“¿Acaso la tomaste tú…? Recuerdo que la tenía en la mañana cuando pasé por aquí”.
“O-Onii-sama, no hay forma en que ella haya podido tomar tu cámara”.
Natsume se los quedó viendo inexpresivamente, y luego simplemente sonrió como una inocente niña.
“… Sí, tienes razón”.
Akira soltó un suspiro y se tranquilizó.
Luego abrió la portátil que estaba en una esquina de la habitación, puso la contraseña y comenzó a trabajar.
“Onii-sama, ¿hay alguna forma de curar a Natsume-san?”
“Aún no lo sé”. Respondió Akira, y volvió a concentrarse en su trabajo.
En ese momento, los ojos de Natsume se movieron a una velocidad asombrosa. La mirada iba dirigida hacia la pantalla de la portátil y a los dedos de Akira.
“Qué irresponsable”.
“No estoy para esas cosas ahora mismo. La estampida está justo frente a nuestros ojos, y el equipo de investigación encontró nuevos rastros de Brutal. Si esa bestia nos ataca junto a las otras, Mesías estará perdido”.
“¿Y qué planeas hacer?”
“Tendremos una oportunidad si nos deshacemos de Brutal antes de la estampida. Pero de cualquier forma, necesitamos refuerzos”.
“¿Entonces le pediremos ayuda a las otras bases?”
“Ja, si lo hacemos, de seguro pedirán un generador de energía. No vale la pena”.
“Entonces, ¿qué planeas hacer? ¿Acaso piensas usar la cabeza del monstruo que encontramos el otro día?”
“Exacto. Esa cosa tiene un poder mucho más allá de cualquier bestia que hayamos visto antes. Si conseguimos usarlo a nuestro favor, entonces…”
“… ¿En serio piensas hacerlo?”
“Sí, pero eso no es todo. Esa chica de allí tiene un gran potencial. Encontré algo sumamente interesante al analizar su sangre”.
“¿Interesante?”
“Kukuku…”
Él rio profundamente, sin responder a ninguna de las otras preguntas que Akane le hizo.
Luego de un rato, él terminó su trabajo y salió de la habitación junto a Akane y la otra chica en bata de laboratorio.
“Hasta mañana”. Dijo Akane a Natsume que solo la despidió con una sonrisa.
Sin embargo, esos ojos azules observaron todo. El funcionamiento de la puerta, la cerradura y el movimiento de los dedos a la hora de poner la contraseña.
Luego, cuando se quedó sola, las luces de la habitación se apagaron.
Los ojos azules se movieron en medio de la oscuridad, viendo luego fijamente a la laptop.
Luego de eso, se escuchó el sonido de teclas siendo aplastadas durante toda la noche.
En resumen, Yuuka-sensei me echó de su clínica.
Al parecer no tuvo otra opción, porque salieron muchos heridos de la pelea de ayer y ya no alcanzaban las camas para atenderlos.
Pero, a decir verdad, esta era una oportunidad perfecta para mí.
Con toda la gente en la clínica, se me hacía difícil salir sin ser notado. Anoche también estaba ansioso por salir e ir a destruir algunos nidos grandes, pero al final, solo pude salir una sola vez al nido más cercano en una escuela primaria.
Pensé que había alguna pista del agujero negro en lugares donde se reunirían bestias mágicas.
Tenía que buscar nueva información en este lugar, seguir metiéndome a otros nidos o tal vez buscar la cabeza del viejo que se fusionó con el murciélago.
Pensé en varias opciones, pero… “Ahora estarás conmigo, Minoru-kun”.
“Muchas gracias…”
Pero no pensé que Nishino Akane sería mi protectora ahora. Al parecer, tenía que quedarme un tiempo en su habitación.
Nosotros, a decir verdad, éramos compañeros de clase anteriormente, y aunque ella no me hubieras reconocido, teníamos una relación en la que ambos sabíamos cosas complicadas del otro.
La verdad es que, por ese tiempo, ella era un personaje que encajaba perfecto como protagonista… no, ¿tal vez como heroína?
Bueno da igual. La cuestión es que, por esos tiempos, todavía no tenía lo necesario para ser una eminencia en las sombras, así que, con mucho esfuerzo y sudor, traté de desenvolverme como tal.
Si fuera posible, quisiera regresar en el tiempo.
Pero, si pienso en esta situación como una oportunidad para rehacer todo, puede que no sea tan mala después de todo. El yo de ahora está lleno de poder y esencia de una eminencia en la sombras a diferencia del yo del pasado.
Entonces, ¿esta no es una oportunidad?
Además, que ella de seguro estará fuera de esta habitación muchas veces debido a su trabajo de caballero, así que podría escaparme cuando quisiera.
El cielo está de mi lado.
“En serio te le pareces…”
“… ¿Hm?”
Mientras pensaba en mi eminencia en las sombras ideal, ella me miró fijamente mientras caminaba a mi lado.
“¿Mi rostro se parece al de alguien más?”
No creo que me parezca a mi yo anterior, mi cara sufrió un cambió completo después de todo.
“Síp, te le pareces. Por ejemplo, esa cara que pones cuando estás pensando en algo se parece mucho a la que ponía él. ¿En qué estabas pensando?”
“Nada importante…” Dije, pero ella se rio.
“En eso también te le pareces mucho. Tienes cosas que jamás quieres decir, ¿no? Cosas que solo quieres que estén en tu mente”.
“No, qué va”.
Negué, pero ella no me creyó.
“Está bien, no tienes que decírmelo. Él era igual… él nunca les decía a otros las cosas más importantes que pensaba. Y así lo siguió haciendo hasta que se fue muy, muy lejos de aquí”.
¿Se habrá mudado?
“Era una persona que nunca decía nada sobre él, pero aun así creo que lo llegué a entender un poco. Después de todo, siempre estaba observándolo”.
Resultó ser una acosadora.
“Minoru-kun, puedes hablar como más te guste”.
“¿Como más me guste?”
“Me refiero a que no tienes que usar honoríficos. Es más, ni siquiera sientes respeto por las personas mayores, ¿verdad?”
¿Cómo lo supo?
Pero está un poco equivocada. No es que yo no respete a las demás personas, o a las personas mayores que yo, es que simplemente no creo que usar honoríficos hacia esa persona realmente signifique una muestra de respeto. Pero como en la sociedad, esta manera de hablar era la forma correcta de comunicarse, como un mob decidí usarla.
Pero además de eso, con las personas que llego a respetar, lo hago de forma sincera.
“Yo respeto a las personas a mi manera”.
“Pensé que dirías eso”.
Ella volvió a sonreír felizmente.
Luego de eso, y mientras caminábamos conversando de cosas sin importancia, llegamos a la zona residencial.
Recordé un poco el pasado.
“Lleguamos, esta es mi habitación”. Dijo ella, deteniéndose frente a una puerta en una de los edificios de la universidad.
“Los dormitorios no fueron suficientes. Por eso construimos otras viviendas en una extensión, y aun así también usamos algunos salones de clase como habitaciones. Aunque como soy una caballero, puedo usar estas habitaciones que son un poco más grandes”.
Al abrir la puerta, vi un salón de clases espacioso. Ya no estaban los escritorios de las mesas, pero la pizarra blanca todavía seguía en la pared.
Las zonas de la habitación estaban divididas por unos tabiques de madera. Ambos entramos a la sala-comedor y justo al lado, estaba la que sería mi habitación.
“Esta es tu habitación, Minoru-kun”.
Era una habitación de unos 6 tatamis, con una pequeña cama y un escritorio, no había nada más.
“Al lado está mi habitación, pero ni se te ocurra espiarme, ¿de acuerdo?” Dijo con una pequeña sonrisa juguetona, y luego siguió guiándome por la habitación. No había puertas, solo tabiques de madera.
Era como si ambas habitaciones fueran una sola, la única diferencia es que la de ella tenía un pequeño casillero gris.
“Minoru-kun, ¿esa es la única prenda de ropa que tienes?”
“Sí”.
Yo todavía estaba vistiendo el atuendo que tomé de la casa de Tanaka-san. Aunque si quisiera ponerme otra ropa, solo tendría que salir a conseguirla.
“Entonces ponte esto”. Dijo ella, sacando una muda de ropa del casillero.
Era un atuendo realmente nostálgico… el uniforme para chicos de la preparatoria Sakurazaka.
“¿Pero ese no es el uniforme de los caballeros?”
“Por supuesto. No debes ponértelo cuando vayas afuera, pero si es dentro de la habitación no hay problema. Puedes usarlo mientras lavas tu otra ropa”.
“En ese caso, gracias”.
Tomé el uniforme.
“¡Bien, póntelo!”
“¿Eh? ¿Por qué ahora?”
“Vamos, vamos, date prisa. De paso yo también pondré a lavar mi ropa”.
Ya veo. Hoy hacia buen tiempo, así que era mejor poner la ropa a lavar lo más pronto posible.
Luego de que ella insistiera tanto, regresé a mi habitación y comencé a ponerme el nostálgico uniforme.
“Umm…”
Era curioso que lo sintiera tan cómodo, como si fuera un tipo de objeto con el que llevaba muchos años, y eso que el traje de slime era mucho más cómodo.
“¿Nmm?”
De repente, encontré una mancha en una de las mangas de la chaqueta. Era como sangre, como aquella vez que me manché cuando estaba utilizando la barra de acero con mi uniforme.
Aunque de seguro solo me lo estoy imaginando. Ni siquiera puedo recordar bien cómo fue que me hice esa mancha aquella vez.
“¿Te queda bien la talla? ¿Terminaste de cambiarte?”
“Sí”.
“A ver, déjame verl—”
Ella se asomó desde el tabique de madera y de repente, se quedó sin palabras. Era como si hubiera visto a un fantasma.
Solo por curiosidad me di la vuelta, pero no había nada.
“… L-Lo siento, en serio lo siento”.
Y de repente, comenzó a disculparse.
Ella se secó las lágrimas y luego sonrió con melancolía.
“Lo siento, es solo que recordé algunas cosas…”
“No te preocupes. Yo también me rio cuando recuerdo cosas”.
No puedo evitar sonreír cada vez que recuerdo algún movimiento o escena perfecta de una eminencia en las sombras.
“Iré a meter la ropa a lavar, regreso enseguida”. Dijo ella, dándose la vuelta, tomando mi ropa y marchándose.
“Y así, finalmente me quedé solo”.
Agradezco que fuera a lavar mi ropa, pero me hubiera gustado que primero que me diera un par de explicaciones.
No tenía nada que hacer ahora mismo, así que me senté en el sofá desgastado de la sala. De seguro era el sofá que usaban para los visitantes.
En la mesa había una taza, una pluma, unas notas y… “… ¿Medicina?”
Había dos tipos de medicina. Una era una tableta blanca, y otra una tableta azul que jamás había visto en ninguna de mis dos vidas.
“Dudo mucho que sea un estimulante”.
Había muchas otras formas y medicinas para doparse, pero sabiendo lo responsable y seria que era Akane, dudo mucho que use ese tipo de medicina.
En ese caso, ¿qué es esta medicina?
Pensé por un momento sobre eso, y al final dejó de importarme y me estiré con pereza.
“Fuuuuu~”
Y, en ese momento…
Sentí que alguien se estaba acercando, así que rápidamente arreglé mi postura.
Luego, la puerta comenzó a sonar, a rechinar mientras la manija se movía de un lado a otro. Era obvio, pues la puerta estaba cerrada con seguro.
No sabía si abrir o no, pero al final me quedé sentado sin hacer nada. El sonido fue haciéndose más fuerte hasta que la manija se rompió.
“Con permiso”.
De repente, un gorila entró a la habitación.
Japón sí que se ha vuelto salvaje, pensé, pero luego me di cuenta que no era un gorila, sino una persona con apariencia de gorila.
De alguna forma, sentía que ya había visto a esta persona antes.
“Así que tú eres el mocoso que Akane rescató”.
“¡¿Q-Quién eres tú…?!”
Decidí hablar mientas temblaba, como todo un personaje secundario.
“No te asustes muchacho. Mi nombre es Saejima Juudai, el vice capitán de los caballeros y un aliado de la justicia”.
“Saejima Juudai…”
Dónde he escuchado ese nombre… Ah, ya recuerdo. Es el gorila que estaba en mi clase.
Lo recordé porque siempre me pareció perfecto para el papel de personaje secundario.
¡Qué bueno que siguió creciendo como un espléndido gorila…! “¿P-Para qué buscas a Akane-san…?”
“En realidad te estaba buscando a ti. Ya sabes, eres un poco sospechoso”. Dijo Saejima, sentándose frente a mí.
“¿Sospechoso…?”
“Un ratón entró a la base. Ah, con ratón me refiero a un espía. En pocas palabras, alguien de una base enemiga se infiltró en Mesías”.
“P-Pero yo no soy ningún espía…”
“Entiendo lo que dices muchacho, pero entiende que es mi deber como un líder de los caballeros dudar de eso”.
“P-Pero yo no lo soy…”
“¡Cierra la puta boca!”
De repente, Saejima me gritó y luego me tomó por el pecho de mi camisa.
“Si quieres, puedo ir y tirarte en un nido de bestias mágicas”. Dijo el gorila.
Con algo tan terrorífico dicho, la única cosa que un personaje secundario como yo podía hacer era temblar.
“Hiih”.
Pero…
“¡¿Qué estás haciendo?!”
De repente, Akane entró gritando, bastante enojada.
“¿Que no es obvio? Interrogándolo”. Dijo Saejima sin soltarme.
“¿Interrogatorio? ¿Con qué permiso…?”
“¿Acaso no es obvio? Con mi permiso como vice capitán de los caballeros. Ya debiste darte cuenta que hay una rata paseándose por la base, ¿no?”
“Él llegó hace dos días, y esa rata de la que tanto hablas, lleva moviéndose por aquí desde hace mucho antes”.
“Ya lo olvidé. De cualquier forma, lo averiguaré luego de interrogar a este niño”.
Saejima y Akane intercambiaron miradas realmente feroces, y luego… “… ¿Qué es lo que quieres?”
“Creo que lo sabes muy bien”.
Saejima me soltó y luego se dio la vuelta.
“Ah cierto. Parece que el capitán llevará a cabo una reunión especial esta noche. Nos vemos más al rato, Akane-chan”. Dijo él, dándole un pequeño golpe en el hombro de Akane y yéndose de la habitación.
“¿Estás bien? No te preocupes, ya pasó”.
Luego, ella sonrió como si nada hubiese pasado, y comenzó a explicarme de la vida aquí en Mesías.
Parece que hoy le toca el turno de noche, así que es mi oportunidad perfecta para salir.