Kujibiki Tokushou: Musou Harem ken - 146. El pasado de Delfina-Esclava de 1 kre
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- 146. El pasado de Delfina-Esclava de 1 kre
Tradicionalmente en Aegina, la mayoría de los [esclavos por tercera vez] se venden por 1 Kre.
Los esclavos son considerados como una un lujo, y sus amos no los dejarían ir a menos que haya sucedido algo considerable o grave. Al repetirlo dos veces, los esclavos vendidos por tercera vez son tachados de incompetentes, y no hay casi nadie que los compre ni siquiera por el precio menos de 1 Kre.
Delfina no fue tachada de incompetente, pero está en una situación en la que hubiera sido mejor que lo fuera.
Se le murieron dos Maestros, y fue vista como una plaga que llevó a sus Casas a la inexistencia.
Por ello, no pudo ser vendida ni siquiera como esclava de 1 Kre.
Fue dejada atrás mientras los otros eran comprados uno tras otro.
Ella continuó siendo dejada atrás.
***
“Hey, ¿has oído? Dicen que mañana, esta habitación será [limpiada].”
En la tarde de ese día, un esclavo dijo de eso de repente.
Delfina, quien se había encogido en un rincón esperando a su nuevo amo, levantó la cabeza y miró hacia esa conversación.
Tres esclavas de mediana edad se reunieron, y hablaron como si estuvieran teniendo un chisme ocioso.
“¿Limpieza? ¿No es eso algo bueno?”
“Bueno, esta habitación está muy sucia después de todo. Sería genial si nos dejaran lavarnos mientras lo hacen.”
“¿Qué estás diciendo? No es ese tipo de limpieza.”
El esclavo que mencionó el rumor susurró algo a las otras dos.
“Eh~, ¡no puede ser!”
“Eso no es limpiar, es desechar.”
“Están diciendo que [la limpieza] será lo mejor. Somos esclavo de 1 kre que no han podido vende, son menos que basura, y se necesita dinero para pagar nuestra comida, y por eso [los limpian] regularmente, eso escuché.”
“¿Incluso si podrían comprarnos hoy?”
“¿Nos van a desechar?”
"Todos los que están aquí, uno, dos, tres, los 31…”
Era una habitación estrecha en la que se lleno 31 esclavos. Su conversación era fácilmente escuchada, y otros esclavos comenzaron a unirse a la conversación.
Delfina no se unió a ellos. Se limitó a escuchar su conversación en un rincón de la habitación mientras se abrazaba a sus rodillas.
Sólo con esa conversación, lo entendió completamente. Al principio era algo sencillo.
Como esclavos baratos que se compran por lotes, sólo dejarlos comer para vivir costaría mucho dinero.
Incluso si se compraran a precio de regalo, sería un déficit después de hacerles comer durante una semana.
Y debido a eso, ellos simplemente se van a "deshacer" de los esclavos antes de quebrar.
“Pero, ¿no es eso bueno? Al fin y al cabo vamos a ser liberados. Aunque es cierto que encontrar un nuevo trabajo a partir de aquí sera difícil……”
Dijo una tímida esclava de unos veinte años. Los esclavos de mediana edad que trajeron los rumores se burlaron de ella.
“Tú, eres una tonta, eh. No hay manera de que nos liberen. Si hicieran eso, los esclavos de 1 kre no se venderían nunca, porque la gente buscaría esos esclavos liberados son pagar un centavos.
“Entonces…”
“Nos van a matar….”
“¿¡Ehhhhh!?”
No sólo gritó la tímida esclava. Varios otros lo hicieron también.
A partir de ahí, fue un gran coro de gritos y oraciones.
Delfina sólo siguió abrazada a sus rodillas, y no pensó en nada.
***
En la tarde de ese día, se abrió la puerta de la habitación.
De esa puerta aparecieron dos hombres.
Uno es el hombre que administra este lugar, el que está del lado de la venta de esclavos.
El otro, parece un matón se mire por donde se mire. Era claramente alguien que hacía trabajos sucios.
“Uno, dos, tres…31 de ellos en total. Date prisa y elige.”
"Sí. Aquí hay 30 Kre. Cuéntalos mientras elijo.”
El hombre entregó una bolsa de tela y entró en el interior de la habitación.
“Dijo 30 Kre.”
“¿30 de nosotros van a ser comprados?”
“Entonces, yo también podría ser comprada.”
Los esclavos que hacían alboroto de ser eliminados comenzaron a murmurar con cierta esperanza.
30 de 31 personas serían compradas. Viendo su posición, seguramente no será para algo bueno, pero podría ser mejor que ser asesinada.
El hombre que las iba a comprar, observo a las esclavas uno por uno.
Y finalmente, se paró frente a Delfina, y le miró la cara después de agacharse.
“¿Has decidido?”
El hombre que había terminado de contar el dinero preguntó desde fuera de la habitación.
“Sí. Me llevaré a todas menos a esta mocosa.”
“¿No te gusta ella?”
"Sí, se ve sombría. Parece siniestra también.”
“Lo entiendo. Esa es una plaga que hizo morir a dos de sus Maestros.”
"¡Eh! Te lo dije.”
"Oigan, todos ustedes salgan de la habitación, aparte de esa chica.”
Los esclavos salieron corriendo de la habitación.
Desde que se mencionó el tema de la limpieza, los esclavos sintieron que esa habitación era un lugar que desprendía olor a muerte.
Probablemente querían salir de allí lo más rápido posible.
Los 30 se fueron, y por último, el hombre también se ponía en marcha.
El vendedor miró dentro de la habitación, miró a Delfina y miró al comprador.
“Hey, ¿te gustaría tener a eso también? Has comprado 30. Te lo daré como servicio.”
“Hah, idiota. ¿Por qué diablos crees que estoy comprando esclavos de 1 Kre? Por supuesto que es para usarlos en prostíbulos por bajo costo. Esa chica esta maldita ¿Cierto? ¿Por qué pagaría mi propia muerte o la de los clientes?”
“Pero puede ser una simple coincidencia, ¿verdad?”
“Se lo que quieres con esto. No quieres pagar dinero por la limpieza, ¿verdad?”
“De acuerdo, de acuerdo. Date prisa y llévate esos 30.”
“¡He! Volveré.”
La puerta se cerró y Delfina se quedó sola.
La habitación que antes era estrecha y abarrotada, de repente se llenó de espacio.
Delfina miró alrededor de la habitación con los ojos en blanco.
***
Al acercarse la medianoche, la puerta se abrió una vez más.
Esta vez, sólo había uno. Era sólo el vendedor.
“Levántate, sal de la habitación.”
La naturaleza de la obediencia absoluta como esclava hizo que Delfina se levantara.
Se levantó, caminó y salió de la habitación.
“Realmente, que cosa tan molesta eres. Tch, apúrate y camina.”
Se escuchó el sonido de la puerta cerrarse, y Delfina recibió una patada por detrás.
Se tambaleó, pero empezó a caminar tal como le habían ordenado.
“……¿A dónde vamos?”
“¿Haa? Iremos a un buen lugar, un gran lugar. Un lugar de ensueño donde se irán todos tus problemas.”
“¿El cielo?”
"Sí, así es. Maldita sea, ¿por qué diablos estoy diciendo?……”
El hombre siguió regateando quejas.
"¿Me van a matar?"
“Sí, así es.”
Respondió con un tono cada vez más molesto. Incluso dejó de disimularlo.
“¿Qué molesto, por qué demonios no te compraron sólo a ti? Hubiera sido mejor que os quedarais muchos o que os compraran a todos.”
Mientras caminaba, Delfina se puso a pensar.
Su cabeza oxidada que no había usado cuando servía bajo su Maestro que era un caballero empezó a trabajar después de mucho tiempo.
¿Por qué?
¿Por qué me van a matar? Porque no fui comprada, porque soy una esclava de 1 Kre.
¿Por qué no fui vendida? ¿Por qué 1 Kre? ¿Por qué me convertí en un esclavo?
Mientras pensaba, fue llevada a un lugar donde la gente rara vez visita, un lugar donde la maleza crece hasta la cintura, el hombre sacó de repente un cuchillo de su bolsillo.
Mirando de cerca, había varios huesos blancos en el suelo.
Era "ese" tipo de lugar.
Huesos y cuchillo.
El olor a muerte se acercó a Delfina.
“No te resistas, te sacaré de la miseria de inmediato.”
“¡No!”
Naturalmente, Delfina salió corriendo.
Al borde de la muerte, huyó desesperadamente.
“¡Tch! No podrás escapar. Este es ese tipo de lugar.”
Aunque molesto, el hombre la persiguió con calma.
Delfina corrió desesperadamente. Siguió corriendo, corriendo y corriendo.
De repente, tropezó con algo y cayó al suelo.
Cayó al suelo de bruces. Soportó el dolor y miró lo que la hizo tropezar.
Era un esqueleto.
"¡Hii!”
Algo estaba clavado en ese esqueleto.
Similar, pero más oxidado que el cuchillo que sostenía el hombre.
Y mientras pensaba en eso, el hombre la alcanzó. El esclavista sostenía un cuchillo en una mano, e hizo que Delfina se levantara agarrando su cabello con la otra.
"¡Se acabó maldita perr-!"
"¡No quiero morir!"
Ella agarró instintivamente el cuchillo y apuñaló al hombre.
El cuchillo oxidado se clavó en el cuerpo del hombre tras oponer cierta resistencia.
“Tú, mocosa de….”
El hombre miró con incredulidad el cuchillo que perforada su pecho.
Delfina salió corriendo. Se apartó del cuerpo del hombre y salió corriendo.
En el camino, tropezó con un esqueleto y tropezó con el suelo, pero no le importó y salió corriendo desesperadamente.
Moriré si no corro ahora, no quiero morir.
Salió corriendo sólo con eso en mente.
“¡Kyaa!”
El suelo desapareció de repente, y una repentina caída sorprendió a Delfina.
Debido a la maleza que le llegaba a la cintura, no pudo ver el acantilado que tenía delante.
Delfina cayó rodando por ese acantilado.
***
“…… Estoy viva.”
Cuando recuperó la conciencia, vio la luna blanca colgada en el cielo.
Sentía dolor por todo el cuerpo, pero por ello, sentía que estaba viva.
“……¿por qué?”
Su cuerpo no se movía, pero en cambio, su cabeza hacía bien su trabajo.
Su cerebro, que se había liberado después de mucho tiempo, recuperó su agudeza y empezó a preguntar [por qué] a todo.
Por qué me he caído, por qué me pasa esto, por qué estoy viviendo una vida así.
[Por qué] hacia todo lo que se le ocurría. Pensó en muchas, muchas cosas, y finalmente, sus pensamientos–se reunieron en "¿por qué me pasa esto?"
¿Porque no me compraron a mi también?
¿Porque mis Maestros murieron sucesivamente?
¿Porque confié mi propia vida a otros después de ser vendido como esclavo?
¿Por qué me sucede esto, por qué?
“Porque…… no tengo dinero.”
La respuesta que surgió de todas esas preguntas, fue esa.
Los catorce años de mi vida, la mayoría de los problemas se habrían resuelto [si tuviera dinero].
“Si tuviera dinero.”
Susurró con delirio.
Y, sus pensamientos cayeron en un profundo asentimiento.
Recreó una escena donde ella tenía dinero. Todo hubiera salido mejor.
Su mente comenzó a generar escenas del [Por qué] no podía hacerlo.
Podía haber evitado toda mi desgracia si…
“Si sólo tuviera dinero.”
Susurró una vez más. Comenzó a ver la verdad, su mente comenzó a encontrar respuestas a sus preguntas y sus grilletes mentales se rompieron.
Delfina cambió su mentalidad.
Delfina Lanmari, 14 años.
“Si sólo tuviera dinero.”
Fue el instante en que la chica que se llamó “Cazadora de fortuna" nació espiritualmente.